Atender a las palabras de revelación que han recibido, y crecer en su conocimiento

2 Pedro enfatiza repetidamente la importancia de la mente y la memoria.

Gracia y paz os sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús. Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia (1.2-3)

vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; (1.5)

Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. (1.8)

Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados. (1.9)

Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas cosas, aunque vosotros las sepáis, y estéis confirmados en la verdad presente. Pues tengo por justo, en tanto que estoy en este cuerpo, el despertaros con amonestación; sabiendo que en breve debo abandonar el cuerpo, como nuestro Señor Jesucristo me ha declarado. También yo procuraré con diligencia que después de mi partida vosotros podáis en todo momento tener memoria de estas cosas. (1.12-15)

la palabra profética...a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro (1.19)

Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos... (2.20)

Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado. (2.20)

esta es la segunda carta que os escribo, y en ambas despierto con exhortación vuestro limpio entendimiento, para que tengáis memoria de las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y del mandamiento del Señor y Salvador dado por vuestros apóstoles; (3.1-2)

Mas, oh amados, no ignoréis esto... (3.8)

creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. (3.18)

Huir de los deseos pecaminosos y destructivos del mundo

2 Pedro habla de los deseos como fuente de corrupción y contaminación espiritual. El reto del Cristiano es escapar la influencia de estos deseos (los tres principales son la avaricia - el deseo desordenado para el dinero y las posesiones; la lujuria - el deseo desordenado para el placer sexual; la ambición - el deseo desordenado para el poder)

habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia; (1.4)

y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda conducta de los malvados (porque este justo, que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inicuos de ellos) (2.7-8) - la implicación es que los destinatarios deben sentir el mismo asco y la misma angustia hacia la iniquidad de los malvados

seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error. (2.18)

Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos... (2.20)

Cultivan cualidades relacionadas con la santidad y la piedad

La vida del Cristiano no es únicamente negativa, de huir cosas negativas. Es también positiva, la cultivación de virtudes a través de la diligencia y la práctica.

todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas (1.3)

vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. (1.5-7)

Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan (1.8) - es decir, las cosas mencionadas en 1.5-7

el que no tiene estas cosas (1.9) - es decir, las cosas mencionadas en 1.5-7

Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; (1.10)

cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir (3.11)

procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles (3.14)

Cutlivar el amor y la paz entre ellos

Vale la pena llamar la atención a las relaciones interpersonales, que se mencionan dos veces.

a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. (1.7)

procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. (3.14)

Prepararse para resistir a los falsos profetas

Pedro les ha advertido de la venida inminente de falsos profetas. Pedro quiere que estén listos para su llegada, para poder resistir su mala influencia.

habrá entre vosotros falsos maestros (2.1)

sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores (3.3)

Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. (3.17)

Poner su esperanza en la segunda venida, y vivir de manera que apresura esta venida

Pedro usa la escatología, la doctrina de las últimas cosas, como fuente de motivación a la vida cristiana.

esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán! Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. (3.12-13)

tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; (3.15)