Pablo Algunos exageran la diferencia entre las enseñanzas que encontramos en las cartas de Pablo y las enseñanzas de Jesús que encontramos en los Evangelios. Pero sí es cierto que a primera vista parece que estas dos figuras importantes del Cristianismo son muy distintos. Por ejemplo, el reino de Dios es el concepto clave en las enseñanzas de Jesús, pero Pablo casi no usa la frase en sus cartas. ¿Cómo explicamos la diferencia entre ellos? En primer lugar, debemos reconocer que los contextos culturales de los dos hombres era muy distintos: Jesús fue un Judío entre Judíos, ministrando en Palestina, un lugar provincial y conservador. Jesús predicaba a una sociedad que por lo general era consciente del contenido y la doctrina del Antiguo Testamento, pero no ponía en práctica lo que sabían. Pablo, en cambio, fue un Judío que llevó su religión judía al mundo griego, a un mundo más cosmopolitano y diverso. Pablo predicó a personas que no tenían ni siquiera el conocimiento más básico de la fe y la ética del Judaísmo y tenía que enseñarles desde cero. Su ministerio no era de recordarles lo que ya sabían, sino de enseñarles cosas que jamás habían escuchado. Además, Jesús seguramente predicaba en arameo, y Pablo en griego. En base a las grandes diferencias de los contextos en que ministraban Jesús y Pablo, es fácil ver que su vocabulario y sus énfasis iban a ser distintos. En segundo lugar, Jesús y Pablo vivían en dos momentos muy diferentes en cuanto a la historia de la salvación. Jesús ministraba antes de su resurrección y exaltación, y antes de la expansión del pueblo de Dios al mundo de los Gentiles. Jesús ministraba para preparar a Israel para la llegada de su reino. Sus enseñanzas sólo daban pistas ocultas de lo que sucedería después. En cambio, Pablo ministraba después de la crucifixión, resurrección y exaltación de Jesucristo. Pablo pudo enseñar abiertamente acerca de estos sucesos, y meditar sobre las implicaciones de ellos para sus oidores. La ubicación de estos hombres en diferentes momentos de la historia de la salvación es otro factor que afecta el vocabulario y énfasis de ellos. En tercer y último lugar, hay muchos paralelos entre las enseñanzas de Pablo y Jesús. No debemos exegerar las diferencias ni pasar por alto las muchas similitures entre ellos. Véase Paralelos entre las enseñanzas de Jesús y Pablo.